Qué se
puede hacer ante un caso de acoso?
Los adultos pueden ser de gran ayuda, aunque a veces resulta difícil ver cuál es el mejor modo de actuar. Si el niño presenta signos de estrés y no estamos seguros de lo que pasa, puede ser que esté siendo acosado.
Todas las escuelas deben contar con estrategias antiacoso; como padres, podemos averiguar si están funcionando y, en caso de que no sea así, buscar el respaldo de otros padres e insistir en que se haga.
Si, finalmente, averiguamos que nuestro hijo está sufriendo acoso, deberemos ofrecerle nuestra ayuda, pero con mucha sensibilidad: ir corriendo a la escuela y pedirles que actúen no es necesariamente la mejor táctica. A los jóvenes, a menudo, les preocupa cualquier movimiento que sus padres pueden realizar y temen sufrir represalias por parte de los acosadores si la escuela toma medidas. Esto en el caso de los adolescentes se complica todavía mas, porque suele ser la etapa en la que menos comprendan el comportamiento o actitudes de sus padres. Por eso es de vital importancia convertirse en su mayor aliado y planear una estrategia conjunta con la que estén de acuerdo.
Los adultos pueden ser de gran ayuda, aunque a veces resulta difícil ver cuál es el mejor modo de actuar. Si el niño presenta signos de estrés y no estamos seguros de lo que pasa, puede ser que esté siendo acosado.
Todas las escuelas deben contar con estrategias antiacoso; como padres, podemos averiguar si están funcionando y, en caso de que no sea así, buscar el respaldo de otros padres e insistir en que se haga.
Si, finalmente, averiguamos que nuestro hijo está sufriendo acoso, deberemos ofrecerle nuestra ayuda, pero con mucha sensibilidad: ir corriendo a la escuela y pedirles que actúen no es necesariamente la mejor táctica. A los jóvenes, a menudo, les preocupa cualquier movimiento que sus padres pueden realizar y temen sufrir represalias por parte de los acosadores si la escuela toma medidas. Esto en el caso de los adolescentes se complica todavía mas, porque suele ser la etapa en la que menos comprendan el comportamiento o actitudes de sus padres. Por eso es de vital importancia convertirse en su mayor aliado y planear una estrategia conjunta con la que estén de acuerdo.
- solicitar el apoyo de amigos y otros familiares,
- mantener una discreta conversación con algún profesor de confianza
- apuntar a su hijo a clases de auto estima, clases de defensa personal o algún tipo de deporte
- acudir a su médico y pedir algún tipo de terapia familiar
- considerar la posibilidad de cambiar de escuela
- http://adolescentes.euroresidentes.com/2008/11/el-acoso-escolar-entre-adolescentes.html